Adidas no lo puede dejar más claro con un slogan tan corto, sólo la combinación perfecta de unas cuantas claves en la actitud, aptitud, capacidades y habilidades de una persona pueden lograr hacer de ella aquello por la que millones le seguirán al fin del mundo, otorgándole el tan ansiado título de LÍDER DE MASAS.
En el arte, en el deporte, en la música, en la política, en el cine … siempre aparece él, a diferentes escalas y niveles pero utilizando de forma muy inteligente y sutil herramientas que logran que una multitud fervorosa se aglomere en cualquier punto geográfico del mundo por escuchar su voz.
CAPACIDAD DE COHESIÓN
Un uso muy inteligente del lenguaje universal del deporte por parte de los líderes políticos son mecanismos eficaces para conseguir cohesionar millones de personas de diferente clase, religión o nivel cultural. A través de equipos de fútbol, baseball, gimnasia olímpica, etc. el político regala a sus ciudadanos el placer de lograr colectivamente unos sueños que de forma personal estarían muy lejos de lograr con sus modestas vidas.
En la película Invictus se explica de forma sutil esta técnica mas como una «maniobra humana» que como una «maniobra política» para en palabras de Nelson Mandela:
«hacer al pueblo soñar con algo grandioso cuando no se tiene nada con lo que poder soñar«.
Mandela eligió el Campeonato Mundial de Rugby de 1995 para lograr ni más ni menos que hacer punto y final a un duro régimen de apatheid y conseguir que una población profundamente dividida entre negros y blancos comenzara a convivir en igualdad y democracia.
PERSEVERANCIA Y CONFIANZA EN SÍ MISMO
Una elevada confianza en sí mismo por parte del líder de masas es condición indispensable para lograr afianzar un gran poder de atracción en las personas que le siguen.
Muhammad Ali lo consiguió en los años 50 y 60 utilizando continuamente provocadoras frases en sus declaraciones:
- «soy rápido, soy guapo, soy el mejor»
- «cuando eres tan grandioso como yo es dificil ser humilde»
- «para ser un gran campeón, tienes que creer que eres el mejor, si no lo eres, haz como si lo fueras»
- «si sueñas con ganarme, será mejor que despiertes y pidas perdón»
- «¿mis objetos favoritos?… los coches y los espejos»
- «Busqué consejos y colaboración de cuantos me rodeaban, pero jamás su permiso».
Esta actitud arrogante al contrario de hacerle ser odiado, despertó y sigue despertando un gran interés y expectación en todo el mundo. Nuevamente las personas admiran un espíritu trangresor y con suficiente capacidad de sacrificio como la de Ali que en el aspecto positivo le hizo con el título de campeón del mundo de los pesos pesados por tres veces y en el negativo, le llevó a ser arrestado y declarado culpable de su negación a acudir como soldado a la Guerra de Vietnam, despojado de su título de boxeo y suspendida su licencia de boxeador (Alí se atrevió a decir que prefería quedarse en su país luchando por los derechos de la clase negra a aspectos tan básicos como sentarse en el lugar que les apeteciese cuando subiesen a un autobús público).
«¿Por qué me piden ponerme un uniforme e ir a 10000 millas de casa y arrojar bombas y tirar balas a gente de piel oscura mientras los negros de Louisville son tratados como perros y se les niegan los derechos humanos más simples? No voy a ir a 10000 millas de aquí y dar la cara para ayudar a asesinar y quemar a otra pobre nación simplemente para continuar la dominación de los esclavistas blancos»…
COMUNICACIÓN
«Aquel Papa que vino del frío hablaba siempre con palabra cálida y firme mientras mantenía fija la mirada en su interlocutor, como si una certeza suprema avalara su discurso«, así se describía la forma de hablar del papa Juan Pablo II (definición muy cercana a la de la escucha activa).
Y no sólo se preocupaba por la forma, también lo hacía por el mensaje, negándose a tener un intérprete a su lado y por ello preparándose como políglota, Juan Pablo llegó a dominar: polaco, esperanto, griego clásico, latín, italiano, francés, español, portugués, inglés y alemán, manejarse lo suficientemente bien en: checo, lituano, ruso y húngaro y contar con nociones básicas de japonés, tagalo y varias lenguas africanas.
Y por si comunicarse de forma cálida y cercana, y además hacerlo en el mismo idioma de las masas católinas no fuese suficiente para él, se autoexigió la disciplina de comunicarse de forma directa, algo extraordinario cuando se trata de hablar con todo el planeta. Y de esta forma, Wojtyła tomó la sabia decisión de eliminar la llamada silla gestatoria usada por sus antecesores para mostrarse en público, se puso a nivel de la calle y de las multitudes.
Realizó 141 viajes en sus 27 años de Pontificado, lo que le hizo ganarse apodos como el de: «el atleta de Dios», «el caminante del Evangelio», el «Papa viajero» o el «Papa peregrino».
Ningún otro Papa se ha encontrado con tantas personas como Juan Pablo II: en cifras, más de 16 millones de peregrinos han participado en las más de 1000 Audiencias Generales que se celebraban todos los miércoles. Ese numero no incluye las otras audiencias especiales y las ceremonias religiosas [más de 8 millones de peregrinos durante el Gran Jubileo del año 2000] y los millones de fieles que el Papa ha encontrado durante las visitas pastorales efectuadas en Italia y en el resto del mundo.
Y no sólo comunicación con el pueblo, numerosas personalidades de gobierno con las que se ha entrevistado durante las 38 visitas oficiales y las 650 audiencias o encuentros con jefes de Estado y 212 audiencias y encuentros con Primeros Ministros le otorgaron el importante papel que jugó en su implicación en conflictos bélicos y enfrentamientos entre naciones y culturas.